Mario Vargas Llosa ha mantenido a todos en alerta por un bache de salud que lo tuvo ingresado para ser atendido clínicamente. Todo esto sucedió en la antesala del casamiento de Tamara Falcó e Íñigo Onieva.
Cabe destacar que Mario Vargas Llosa está ligado a dicha familia por haber sido la pareja de Isabel Preysler durante varios años. Sin embargo, el escritor ya no forma parte del día a día de la familia Falcó aunque guarda gratos recuerdos.
Pese a que Vargas Llosa y la madre de la marquesa de Griñón pusieron punto final a su vínculo hace unos cuantos meses, él no guarda rencor hacia dicha familia. Así ha quedado demostrado en su reaparición en público.
El escritor reapareció con un guiño hacia la familia de su expareja.
Según ha publicado la revista “Lecturas”, en una fotografía se lo puede ver a Mario Vargas Llosa con un 'look' que no es habitual, más informal y casual. Lo que ha llamado la atención, es que el Premio Nobel luce en la foto con una gorra cuyo diseño pertenece a la firma creada por Ana Boyer y Fernando Verdasco.
Sin rencores
De este modo, Mario Vargas Llosa ha demostrado que no tiene problemas en mostrarse con objetos que fueron fruto de su unión con Isabel y que, pese a estar distanciados, no guarda rencores hacia la familia que lo cobijó durante varios años.