El hecho de que veamos los rostros más asimétricos como más bonitos ya es un hecho, pero ¿sabías que cuanto más envejecemos más posibilidades hay de que el rostro se os vaya poniendo más asimétrico?
Por supuesto que los jóvenes tenéis más oportunidades de cambiar lo que revelaremos a continuación pero como la belleza también depende de los hábitos saludables todos pueden hacer un cambio en la apariencia de su rostro.
Hábitos saludables para un rostro más asimétrico
Todo tiene que ver con la los 14 huesos que hay en la cara, los cuales no están fusionados entre sí, tienen movimientos muy pequeños pero que pueden convertir un rostro en asimétrico a través del tiempo. Esto último no solo se relaciona con la belleza sino también con la salud y los hábitos saludables.
Según un estudio de 2014, se analizaron alrededor de 114 parejas de hermanos gemelos para comprobar cómo les iban cambiando los rasgos y los hábitos de cada uno, como por ejemplo si fumaban, qué comían y si dormían boca abajo, de lado o de costado.
Aquellos que dormían boca abajo tenían una mayor desviación de la nariz y de la comisura de la boca hacia un lado, ante lo cual dormir boca arriba o de costado trae menos imperfecciones.
Asimismo, la buena postura de la lengua es una parte muy importante ya que la misma tiende a desviar el rostro hacia abajo si no se posiciona bien o hacia adelante, como debe ser, por lo que la lengua debe tocar siempre el paladar y empujar la comida hacia el mismo durante las comidas. Si tenéis duda podéis buscar cómo es una correcta deglución, algo que sumar a los hábitos saludables.
Algunos especialistas también recomiendan ejercicios de respiración como el buteyko para poder dormir mejor de noche y no respirar por la boca, lo cual tampoco es saludable para el organismo humano.
Así que si tienes en cuenta todo esto puede que en unos años os parezcan más a Angelina Jolie y Brad Pitt de lo que esperabas. Venga, ¡a implementar hábitos saludables!