El musgo es el ancestro de todas las plantas vivas de hoy. Los científicos han estado investigando a esta planta para saber hasta qué punto es crucial para la vida en la Tierra. Algo curioso es que podréis encontrarlo en todas partes, ya sea en bosques o incluso en la Antártida.
Esta planta no tiene raíces, pero tiene algo similar llamado rizoide. Este le permite anclarse y absorber los minerales que necesita para sobrevivir. El musgo es una planta pequeña que suele crecer en ambientes con sombra y humedad, como en las rocas o en los bosques.
La importancia del musgo
Según National Geographic España, las muestras de musgos de diferentes ecosistemas demostró que "las poblaciones del musgo cubren la asombrosa cantidad de 9,4 millones de kilómetros cuadrados en los tipos de entornos estudiados, es decir, un tamaño de China o Canadá".
"Las poblaciones del musgo cubren la cantidad de 9,4 millones de kilómetros cuadrados en los tipos de entornos estudiados".
Además, los expertos y científicos compararon suelos con presencia y ausencia de musgo y el resultado ha señalado que el suelo con musgo tiene más nutrientes. Este potencia el ciclo de elementos como el fósforo, el nitrógeno y la materia orgánica.
Otro punto importante es que esta planta absorbe el carbono y llega a retener 6.430 millones de toneladas métricas. Algo muy importante en nuestra presente atmósfera saturada. Asimismo, en lugares de erupción volcánica se comprobó que el musgo es la primera planta en crecer.
Los científicos llegaron a la conclusión que la presencia de musgo asegura un suelo sano y una tierra beneficiosa para los ecosistemas. Además, los patógenos vegetales y los genes más resistentes son menos frecuentes en tierras con musgo. Sin dudas, se trata de una planta poco valorada que tiene una función muy importante.